En el pasado 2019, los Latin Grammy tuvieron un hack por parte de los reggaetoneros que hicieron un llamado a la Academia de los Grammy por no ser considerados como un género independiente y meterlos a la olla donde estaban el resto de los éxitos ya construidos. Es decir, desde que conocemos de la existencia del reggaeton en los 90 hasta la fecha, jamás se la había dado como tal un lugar en estos premios, pues para ellos no era algo que debiese considerarse como un ente individual, sino “sólo un movimiento más dentro de lo pop”. Una visión muy limitada, a mi gusto.
Como en cualquier junta de compañía internacional, aquí se tuvo que llegar con números y datos duros. En los últimos años los éxitos que han creado en el mundo del reggaeton, entiéndase Maluma, J Balvin, Karol G, Bad Bunny, Daddy Yankee (el verdadero pionero del género), Ozuna, Luis Fonsi, entre tantos más, se demostró que no es un género efímero. La evolución del reggaeton es de debido estudio y sobre todo por la increíble fuerza que tomó en los últimos tres años para acá, donde por todos lados, esta música suena con muchísima fuerza, a pesar de que no sea en el idioma natal de muchos de los que lo consumen.
El reggaeton es más que fiesta, beats y perreo. Hoy se ha vuelto también una bandera de revolución cultural y política para muchos, y esto dista de ser, “un género más a incluir en lo general”, como la famosa, “Recording Academy”, quería ponerlos. Así es que se ha ganado esta primer batalla que comenzó con el, “Sin Reggaeton No Hay Latin Grammy”. Para este 2020, lograron entrar con fuerza como una “nueva” categoría, y al fin podrán reclamar con fuerza estos premios.
Este es un primer paso, lo que sigue es que los Grammy como tal, comiencen a premiar más a lo Latino en equidad contra otros artistas y a su vez, también hayan más géneros que tomen el spotlight en sus transmisiones, no sólo, “rock, pop, country”, y algunos highlights de Top 40.
Trino Treviño – @trinodj